La UEFA ya ha experimentado con dos asistentes ‘de área’ más en los partidos de la pasada Liga Europa, cuya participación puede sustituir a soluciones tecnológicas que no son del agrado del máximo organismo futbolístico mundial.
Estos colegiados, por ejemplo, podrían ver con más precisión jugadas como la que se produjo en el Mundial de Sudáfrica 2010, cuando no se concedió un gol al inglés Frank Lampard en el partido de octavos frente a Alemania, cuando el balón había entrado claramente.
Esta jugada provocó una gran polémica, porque significaba el 2-2 provisional. El encuentro finalmente terminó con victoria germana por 4-1.