Italia y el fútbol local, se ven involucrados e indignados, en un escándalo de partidos amañados por corredores de apuestas clandestinos, llamado «Calcioscommesse», que puede tener relación con grupos del crimen organizado, según la Fiscalía de Cremona que lleva adelante las investigaciones para desentrañar la trama del fraude en el fútbol italiano.
Las investigaciones han sacado a la luz el nombre del centrocampista del Roma y de la selección nacional Danielle De Rossi, por ahora no investigado, interceptado supuestamente en una intervención telefónica.
Según informa la Gazzetta dello Sport, el nombre de Rossi habría sido interceptado en una conversación con el portero del Cremonose Marco Paolini en el que se hablaba del partido Génova-Roma, que empezó con ventaja para los romanistas de 0-3 y acabó 4-3. Un partido en el que De Rossi, sin embargo, no jugó por sanción.
Mientras tanto, la Fiscalía de Cremona comenzó hoy los interrogatorios de las personas encarceladas tras la operación, que implica a directivos y jugadores como el excapitán del Lazio y exinternacional Giuseppe Signori, estrella de los años 90.
El Fiscal, Guido Salvini ,firmó el pasado miércoles 16 custodias cautelares, pero a Beppe Signori y otras seis personas les fue concedido el arresto domiciliario.
También fueron detenidos Vittorio Micolucci y Vincenzo Sommese, jugadores en activo del Ascoli (Segunda División), así como los exfutbolistas Mauro Bressan, exjugador del Fiorentina, y Antonio Bellavista, antiguo capitán del Bari.
Durante los interrogatorios de hoy los magistrados y el fiscal tratarán de descubrir cómo se movía el grupo para falsificar los partidos. Y, sobre todo, quién los financiaba para corromper a los jugadores.
Según las investigaciones, la tarifa de las trampas estaba a 400.000 euros para los partidos de la primera división, 120.000 para los de segunda y 50.000 para la Liga Profesional, por lo que cada domingo se movían millones de euros.
«La presencia entre los inversores y los que apostaban de algunos grupos de entornos inciertos como los gitanos y albaneses, crean un un terreno fértil para la insinuación de una criminalidad organizada de alto nivel», refiere en un escrito el fiscal.
Fuente: Golgolgol.net