El técnico portugués José Mourinho no quiere moverse del banco del Real Madrid. Y no será porque no le hayan llegado ofertas. Una de ellas, a todas luces estratosférica. La del Anzhi ruso, que le ofreció ¡25 millones de euros netos por temporada! El luso desestimó siquiera sentarse a negociar con el propietario del club de Majachkalá, el multimillonario Suleyman Kerimov.
El acercamiento tuvo lugar antes de que acabara la pasada temporada, los meses de febrero y marzo, cuando no estaba meridianamente claro que Mourinho fuera a continuar en el Real Madrid para este curso. Desde ese momento, Kerimov ya estaba manos a la obra con la construcción del nuevo Anzhi. Y pretendía que la piedra angular fuera el técnico portugués.
Pero Mourinho ni lo pensó, a pesar de que la oferta le hubiera convertido no ya en el entrenador mejor pagado del mundo, que lo es, sino en el técnico con el mayor sueldo de la historia del fútbol. Además, hubiese tenido carta blanca para hacer un equipo a su capricho, como ya le ocurrió en el Chelsea.
Una de las sorpresas que tenía preparadas el archimillonario Kerimov era la de Cristiano Ronaldo. En su proyecto tenía la intención de tentar al jugador y al Madrid para llevarse al Bota de Oro al Cáucaso. Un sueño imposible. Al menos, ahora.
El Anzhi pretendía poner al servicio de Mou una constelación de estrellas. Entre ellas, Dani Alves, al que hace escasas semanas ofrecía 15 kilos al año; Neymar, por el que tambien han preguntado; Vidic, el último que suena para la defensa… además de los ya fichados Samuel Eto’o y Roberto Carlos.
Mourinho no habló de la duración del contrato ni de ningún otro punto de un hipotético acuerdo. El entrenador madridista sabe que su proyecto en la Casa Blanca es para hacer historia. Como dijo en su presentación, «lo bonito no es ganar, lo bonito es ganar con el Real Madrid». De ahí que, fiel a los cuatro años que firmó con Florentino Pérez en mayo de 2010, no se dejara seducir por un sueldo digno de entrar en los Récords Guinness.
El Manchester City también hizo un movimiento con el entorno de Mourinho -también con Cristiano, para el que tenía destinados 170 millones para presentar una oferta al Madrid- para hacerle llegar una oferta de 20 millones por año. Ocurrió cuando el equipo del jeque Sheikh Mansour no tenía segura su participación en la Champions de esta temporada. Mou, como con el Anzhi, agradeció el ofrecimiento. Nada más.
El presidente del Besiktas, otro multimillonario, Yildirim Demiroren, fue más allá y le puso sobre la mesa un cheque en blanco. Demiroren ya se llevó a Estambul a Guti y Schuster y guarda una excelente relación con Jorge Mendes, agente del luso. La contestación fue la misma.
Mourinho no contempla ni por asomo abandonar el Real Madrid. El año pasado hubo algún momento en el que se llegó a plantear su continuidad en el club blanco. Pero tras el adiós de Jorge Valdano y su nombramiento como mánager general deportivo, la entidad ha adecuado su estructura al gusto del técnico portugués. Ahora se siente con todo a su favor para completar el asedio al Barcelona en Liga y Champions, toda vez que en la Copa ya le derribaron.
Mourinho hace unos días también y luego de los incidentes con el Barcelona, dejaba claro que su futuro es, más que nunca, blanco. En una carta al madridismo, afirmó: «Sólo quien no me conoce puede soñar, inventar o creer que pueda marcharme ahora del Madrid… Siento que mi motivación es enorme y mi madridismo mucho más grande (…) No me marcho».
Fuente: Marca.com