Cristiano Ronaldo pasó desapercibido una vez más con su equipo, esta vez fue en el duelo frente al Mallorca.
Aunque esta temporada es una de las mejores que ha tenido el delantero portugués, las ultimas jornadas no han sido del agrado de Cristiano Ronaldo y de los aficionados merengues. Una vez más el delantero lució desconectado del encuentro y tan solo se hizo sentir en la primera parte, cuando un disparo suyo se estrelló en el horizontal. En Palma volvió a firmar una actuación decepcionante, aunque no se puede ocultar que el ariete luso intentó por todos los medios, pero al final no pudo hacer mucho para salvar su presentación. El mal momento de Cristiano no es invento de los medios informativos y mucho menos de las criticas de los aficionados, es el mismo jugador quien deja ver su impotencia de no poder hacer las cosas bien y la emprende con los demás, así como lo hizo al termino del encuentro frente al Mallorca con el árbitro Pérez Montero.
La cara de Ronaldo ya no transmitía buenas sensaciones en los prolegómenos del encuentro. Antes, durante y después del encuentro, mostró un rostro serio, para muchos de enfado y para otros de concentración. Durante el encuentro le costó entrar en el partido a Cristiano, en el primer cuarto de hora perdió los primeros cuatro balones que tocó y las burlas en las gradas, no se hicieron esperar. El luso estalló con el colegiado tras un empujón de Cendrós que no pitó, lo que le valió ganarse, una vez más, la enemistad de la grada. Volvieron los cánticos y los pitos contra Ronaldo. «Cristiano es una barbie», o «Ronaldo, maricón».
El cuarto derbi de la temporada está a la vista y Crisitiano llega con un bagaje bajo. 27 disparos y cero goles son sus números a balón parado en esta temporada. Los aficionados parecen darle la espalda a su goleador en el momento en el que quizá más los necesita, pues luego del pasado derbi en el que los merengues cayeron en manos del Barcelona, las gradas del Bernabéu también se han hechos sentir con el inconforme juego del crack portugués.