El seleccionador de Italia intenta saber si las palabras de Mario eran para él.
El delantero italiano ha desatado la polémica en el desarrollo de esta Eurocopa 2012. Balotelli firmó el segundo tanto de Italia sobre Irlanda, que les basto para clasificar a los cuartos de final. La celebración empeño la bonita definición del ‘nene’, quien a pleno grito exclamó: «son todos unos hijos de…», justo en ese momento su compañero Leonardo Bonucci, le tapó la boca para evitar que el mensaje fuera emitido. La duda quedó sembrada, porque aún no se sabe a quien dirigía Balotelli sus palabras.
Cesare Prandelli, entrenador de la selección italiana de fútbol, habló sobre el gesto que nadie pudo ver de su jugador. «Es importante el espíritu del equipo. Todos los jugadores están al máximo. Todos corren por el equipo. También Mario. Entró en el campo e hizo lo que le pedimos. Le falta sonreír, pero eso no puede prepararlo, tiene que ser algo espontáneo. Es un cuerpo extraño en el equipo. Él es así. Pero fundamentalmente es un chico de oro«, dijo.
«En el gesto de Bonucci, de taparle la boca, se ve el espíritu de equipo. Fue un gesto para protegerle. ¿Si quería desfogarse conmigo con su gesto? No lo sé, ya se lo preguntaré si la tomó conmigo. Pero yo estaba contento por él. Sus 20 minutos han sido los mejores de sus tres partidos», agregó.
Asimismo, añadió que su jugador tiene que dar «un salto de calidad» para convertirse en un campeón, y añadió que debe aceptar las críticas o estar en el banquillo. «El día que se de cuenta, que nadie le quiere hacer mal y estamos aquí para ayudarle, se convertirá en un gran campeón», indicó.