Es la primera vez en mucho tiempo que el portugués no celebra un gol y se marcha sustituido a los vestuarios.
Bastante llamativa, curiosa, extraña, rara, resultó ser la actuación de Cristiano Ronaldo frente al Granada en el marco de la jornada 3 de España. El ariete luso no sólo fue la figura del encuentro por sus dos goles anotados (sus primeros dos tantos de la temporada), sino que también, sorprendió al mundo entero cuando en ninguna de sus dos anotaciones celebró a rabiar como nos tiene acostumbrados. Ademas, vivió algo que no sufría desde hace mucho rato y es que tuvo que ser sustituido por Gonzalo Higuaín, luego de que sintiera fuerte molestias en su muslo izquierdo.
Sin duda alguna fue un partido bastante épico y fuera del contexto en el que hemos visto comúnmente al goleador del conjunto merengue. Más allá de su extraña reacción, Cristiano se mostró triste pero a su vez imparable con la red y está a muy poco de convertirse en uno de los máximos anotadores del club español. Si continua así esta temporada y si este fue el arranque de una nueva racha anotadora, muy seguramente al final de la misma estaremos hablando nuevamente de registros ‘extra-planetarios’.
Los dos primeros tantos ligueros del portugués, que ya lleva 151 con el Madrid, apenas los festejó. El crack portugués suma 114 goles en Liga, 10 en Copa, 23 en Champions y tres en Supercopa en apenas tres temporadas al servicio del Madrid. Casi una media de 50 goles por campaña lleva CR7 a estas alturas.
Si mantiene su promedio anotador, al final de la campaña podría subir hasta el sexto puesto, superando los 178 goles de Gento y dejando atrás a otros mitos blancos como Amancio, Butragueño y Pirri. Por delante sólo estarían Hugo, Puskas, Santillana, Di Stéfano y Raúl, míticos delanteros del club blanco, que han marcado el precedente en uno de los mejores clubes del mundo.
