La «tristeza» que vive en el Real Madrid quedó a la sombra de la alegría con la que celebró un nuevo gol con su selección.
La selección de Portugal venció a domicilio 1-2 a su similar de Luxemburgo, en un juego correspondiente a la primera jornada de las eliminatorias mundialistas en Europa. Los locales se fueron en ventaja con un gol de Daniel da Mota (minuto 12′), quien remató perfecto un rápido contragolpe. Igualó Portugal por intermedio de su goleador y capitán Cristiano Ronaldo (28′ minutos), tras un errónea salida de la defensa rival. Hélder Postiga (53′ minutos), fue el encargado de poner cifras concretas en el marcador y entregarle los tres primeros puntos al seleccionado luso.
Más allá de la victoria y los tres puntos, la alegría en Portugal y el centro de las miradas fue Cristiano Ronaldo, quien reapareció en acción tras admitir públicamente que estaba «triste» y por ello no había celebrado sus últimos goles con el Real Madrid. Sin embargo, el ariete luso si celebró (no lo hizo a rabiar como de costumbre, pero al menos lo hizo con felicidad y agrado) el tanto con el que empató su selección y que colaboró emocionalmente para la posterior remontada en el marcador.
Cristiano está bien. Es la conclusión que sacan sus compañeros en la selección. Marcó, rió y se abrazó a sus compatriotas, que no creen que el madridista tenga tristeza alguna. «Ronaldo está bien. ¿No le habéis visto? No está nada triste, está bien«. Las palabras de Nani, ex-compañero de CR7 en el Manchester y uno de sus amigos en la selección, resumen el sentir general en la expedición lusa.
Pero lo que realmente hace feliz a Cristiano es marcar. Ayer volvió a mojar y lo celebró sonriendo. Con el de ayer ya suma cinco tantos esta temporada. Dos en Liga, otros tantos en Supercopa y uno con su selección, donde va camino de convertirse en un mito. Otro de los motivos que tiene para sonreirle a la vida y seguir demostrando con su fútbol, por qué es considerado uno de los mejores futbolistas del mundo.