La joven estrella del Santos terminó yéndose a los vestuarios tras pisar a uno de sus rivales.
Para muchos esto no tiene nada del otro mundo. Pero para otros (como yo), si es muy sorprendente leer, escuchar y veer noticias como estas. Y aclaro que no me sorprendente la expulsión, ni la sanción disciplnaria del árbitro; simplemente es muy extraño decir estas cosas sobre un jugador como Neymar, que nos tiene acostumbrados a hablar de sus golazos, jugadas y su particular estilo de jugar al fútbol.
Pues bien, de todo eso parece que se olvidó la estrella del Santos en el duelo que igualaron a unos (1-1) su equipo y el Gremio, correspondiente al calendario del torneo brasilero. Neymar fue expulsado al comienzo del segundo tiempo por un altercado con el lateral Pará, su antiguo compañero de equipo, y un minuto después de haber recibido la tarjeta amarilla por protestar una decisión del árbitro…
La actitud de Neymar en dicho compromiso es sólo una muestra más de que detrás de esos ídolos y grandes futbolistas, hay seres humanos que al igual que todos nosotros, sienten y cometen errores. Finalmente, aclaro que no estoy criticando a nadie, sólo me pareció bastante llamativo aprovechar esta oportunidad para que vean que «a ser futbolista se aprende, pero a ser persona no»…
Neymar perdió los papeles por la impotencia de un duelo y dejó ver al mundo una parte de su lado menos humano.