Los tetracampeones acabaron con la ilusión de la inexperta selección Colombia que, sin embargo, hizo historia en esta nueva presentación mundial.
Pese a la derrota y la eliminación, más que destacable resultó ser la presentación del seleccionado cafetero en este mundial de Tailandia 2012. El primer objetivo era realizar una muy buena fase de grupos y con el pasar de los partidos la ilusión fue creciendo, los rivales fueron quedando en el camino y la final era el último escalón de esa gran campaña.
Sin embargo, y lastimosamente, Colombia tuvo que «bailar con la más fea» y terminó eliminado en manos de la mejor selección de la historia en esta disciplina. Ahora, Colombia se prepara para el próximo domingo enfrentar a su similar de Italia, en la lucha por el tercer lugar de este campeonato mundial.
Los goles del seleccionado brasileño llegaron por intermedio de un doblete de Gabriel (30» segundos y 27′ minutos), un autogol de Toro (29′ minutos). Por su parte, la única anotación del conjunto colombiano fue obra de Jonathan Toro (minuto 17′).
La victoria le permite a la selección de Brasil, ademas de continuar como gran favorito al título, avanzar a la gran final del certamen y preparar un emotivo duelo ante su similar de España, que consiguió su tiquete en la otra semifinal ante Italia. El clásico europeo terminó (4-1) en favor del seleccionado ibérico.
La primera parte se cerró con igualdad a unos (1-1) y luego de 20 intensos minutos, en los que Brasil controló, dominó, generó las mejores opciones, pero casi no pudo vencer la resistencia colombiana, que cuenta con un Juan Lozano, a mi juicio, el mejor portero de este campeonato mundial. De sus determinantes atajas nació la fuerza que le permitió a la tricolor afianzarse en la cancha y también hacer daño a su rival.
En la segunda parte las cosas no cambiaron demasiado, Brasil siguió comandando las mejores acciones y Colombia se aferró a su juego táctico para tratar de seguir siendo la gran sorpresa del certamen. Falcao, considerado el mejor jugador del mundo, jugó algunos tramos del encuentro, pero no fue tan desequilibrante para Brasil, como si lo había sido en fases y partidos anteriores.