Daniel El colegiado fue agredido brutalmente por los aficionados y jugadores durante un partido amateur disputado en Chile.
La violencia sigue siendo uno de los lunares que jamas ha podido extirpar el fútbol de su majestuosa existencia. Cuando no es por parte de los hinchas, son los mismos jugadores quienes se enseñan en llevar a los extremos las diferencias dentro del terreno de juego. Muchos han sido los episodios oscuros que ha vivido el fútbol por culpa de la violencia, pero siempre han sido los árbitros lo más perjudicados por la ignorancia de aquellas personas que se hacen llamar «hinchas».
Una acertada o equivocada decisión que beneficie o perjudique a cualquier equipo, siempre acaba siendo uno de los principales motivos por los cuales un árbitro es insultado verbalmente y, en caso extremo, golpeado dentro de la misma. En el fútbol élite es muy raro ver ya eso, pues las autoridades están pendientes de cuidar la integridad física de todos los actores de un partido de fútbol.
Sin embargo, en el fútbol aficionado o «balompié amateur» es muy común encontrarnos con violencia entre jugadores y agresiones por parte de los jugadores con los árbitros. En un principio pensé que esto sólo sucedía en los torneos de mi país, pero navegando en la red me encontré con la sorpresa de que en Chile también se sufre bastante con esta ‘epidemia’.
Las víctimas fueron dos árbitros chilenos, quienes recibieron una brutal paliza a la conclusión de un partido de fútbol amateur. Jugadores y aficionados de unos de los equipos se ensañaron con unos colegiados que no recibieron auxilio…
Las consecuencias no podrían ser distintas; uno de los dos terminó con su rostro lleno de sangre, su cabeza llena de chichones y su boca sin dientes! El otro árbitro chileno fue golpeado fuertemente y quedó en el suelo casi inconsciente, tras el brutal ataque de los cavernicolas que «le dieron como a violín prestado».
El suceso, que le está dando la vuelta al mundo por medio de las redes sociales, es bastante lamentable y quise comentarlo con ustedes para que lo re-compartan entre sus amigos y entre todos tomemos consciencia, para que algún día se pueda erradicar la violencia del deporte más bello del mundo, el Fútbol.