Daniel El joven francés se convierte en la primera baja del Real Madrid para enfrentar al Atlético de Madrid en la final de la Copa del Rey.
El sábado 11 de mayo de 2013 será recordado como uno de los peores días que ha vivido el Real Madrid. En el calendario estaba programada la visita al Espanyol y con lo que nadie contaba es que iba a ser una fecha para el olvido. El resultado fue empate a unos (1-1) que sentenció la coronación del Barcelona como campeón de la liga.
Pero, más allá del empate con sabor a derrota, lo más lamentable de la noche en Barcelona fue la perdida de Raphael Varane, defensa central, quien se rompió el menisco de la rodilla derecha, estará entre 4 y 6 semanas alejado de las canchas y no podrá jugar el Real Madrid-Atlético de la final de la Copa del próximo viernes.
Transcurría el minuto 20′ de partido cuando se prendieron las alarmas en Madrid. Varane se tuvo que retirar del terreno de juego con la rodilla maltrecha tras un golpe fortuito con Wakaso. El joven francés fue examinado en el mismo terreno de juego y se vio claramente que no podía volver con una evidente cojera. En su lugar ingresó Xabi Alonso para reorganizar la zona defensiva.
«La lesión de Varane tiene una gravedad media. Aunque no quiero avanzarme a los médicos creo que no tiene posibilidad de jugar la final de Copa y tampoco el resto de partidos», dijo Mourinho nada más acabar el partido del sábado, quien restó trascendencia a este contratiempo. «No vamos a dramatizar porque tenemos alternativas en ese puesto», añadió el técnico luso.
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