Esa es la cantidad de elásticas que utiliza un jugador de fútbol durante los partidos que corresponden al plus de una campaña.
Entre las cosas que diferencian a los futbolistas de los demás deportistas y que los ubica a todos en una misma bolsa, es la costumbre de intercambiar camisetas con los rivales al termino de un partido. Además, también es muy común ver a un futbolista regalando su camiseta a algún aficionado o amigo.
Esta particularidad, generalmente sólo se ve en el fútbol élite que es donde los patrocinadores dotan de indumentaria a los respectivos equipos. En el balompié aficionado es muy difícil que esto suceda, pues en el mayor de los casos el jugador sólo tiene una casaca para todos los partidos.
Conscientes de lo popular que es el intercambio de camisetas entre los futbolistas, una entidad estadística del deporte realizó un estudio en el que definió el total de camisetas que utiliza un jugador de fútbol durante una temporada. Los resultados son llamativos y no muy lejanos a lo que me esperaba antes de conocerlos.
Según el mencionado estudio, un futbolista utiliza en promedio un total de 130 camisetas entre las que se intercambian o regalan, las que son cambiadas por daños o manchas de sangre y las que habitualmente usa por juego disputado.
Claro que, esas son las cifras que un futbolista de un club grande de Europa que tiene las competencias locales más los torneos continentales. Sin embargo, no todos los clubes pueden cubrir el gasto que implica 130 camisetas al año por jugador. Tampoco los patrocinadores técnicos.
Hay clubes que limitan el número de camisetas para cada uno de sus futbolistas por temporada. Si sobrepasan ese límite, las camisetas demás que haya usado correrán por cuenta de él, como sucede en la mayoría de clubes del fútbol colombiano.
En resumen, estamos refiriéndonos a que en promedio un jugador gasta dos camisetas por partido. Algunos más y otro menos, pero en esa es la media que se extrae de las 130 camisetas que usa un futbolista europeo por cada temporada.
