Los jóvenes y talentosos futbolistas brasileño y galés, respectivamente, debutarán en el partido más importante de sus nuevos equipos.
Barcelona y Real Madrid se verán las caras una vez más para medir fuerzas entre sí y saber a estas alturas de las vida cual de los dos es el mejor equipo de España y, siguiendo las tendencias de la actualidad deportiva, del mundo.
Aunque para muchos el mejor rendimiento ahora lo posea el Bayern Múnich de Alemania, último campeón de la Champions League, el poderío global de cúles y merengues va mucho más allá de un resultado o de un estilo de juego.
Una vez más se ‘paralizará’ el mundo deportivo para concentrar su atención en el estadio donde se disputarán los 90 minutos más tensionantes y emotivos de esta primera parte de la temporada. La razón para tanto alboroto es que se trata del único partido capaz de enfrentar a varios de los mejores jugadores del mundo.
En ese orden, lo llamativo durante este primer Super Clásico de la temporada es que ya no sólo serán Lionel Messi y Cristiano Ronaldo el centro de atención, también están invitadas dos nuevas estrellas que llegaron para reforzar los equipos esta temporada y que esperan estar a la altura durante su debut oficial. Obviamente ellos son: Neymar y Bale.
Neymar, será titular en el cuadro azulgrana, atesora una técnica prodigiosa trabajada en Brasil. Es ese tipo de jugador que antes fueron Ronaldinho, Rivaldo o Romario. Pura fantasía con el balón en los pies y con una gran facilidad de desborde para enfrentar el área y lograr el gol.
Lo tiene todo para triunfar y brillar durante su primer Super Clásico salvo una cosa, apenas ha jugado en Europa y esta será una prueba más para ver de que está hecho realmente. Aun así, ha demostrado tiene condiciones de sobra para adaptarse y formar una delantera que puede marcar una época junto a Lionel Messi.
Neymar llega a su primer gran reto con el Barcelona tras haber marcado un par de goles, destacarse con un gran pasador y haber demostrado que su magia también le sirve para dejar en el camino a rivales europeos.
Al frente del crack brasileño estará el fichaje más caro de la historia y que todavía no ha terminado de ganarse a los aficionados blancos por culpa de las molestias físicas que le han perjudicado durante sus primeros días en el Real Madrid.
Sin embargo, Bale tiene una complexión portentosa, como demuestran las vertiginosas carreras que durante seis temporadas disfrutaron al norte de Londres. Su velocidad y la amplia zancada de la que hace gala son sus mejores armas para desarbolar a la defensa rival. Además, el extremo tiene una pegada muy potente tanto en jugadas a balón parado como en carrera.
Este perfil de jugador casa a la perfección con el de Cristiano Ronaldo. Otro futbolista excepcional que también convierte su potencia en su principal virtud. Ya sea a la hora de golpear con violencia la pelota o de arrancar para driblar a un rival, su físico le permite salir airoso de cualquier lance del juego.
Neymar y Bale son la guinda que este verano Barça y Madrid han puesto sobre el pastel de sus lujosísimas plantilla. El conjunto catalán pagó, según la versión mayoritariamente aceptada, 57 millones de euros por los derechos del brasileño, mientras que el Madrid, según la versión oficial del club, se disparó hasta los 91 para hacerse con los servicios del galés.
