Daniel Los dirigidos por el siempre polémico José Mourinho sumó una nueva victoria como local (2-1) y se acercó a la cima de la tabla de posiciones.
Entre ayer y hoy se disputó Inglaterra la jornada 19 de la Premier League, la última del año 2013, y las emociones que arrojó cada uno de los partidos fue respectiva al nivel que siempre se aprecia en el fútbol inglés. El partido más llamativo lo protagonizaron Chelsea y Liverpool, que se disputaron uno de los puestos de arriba en Stamford Bridge.
Para sorpresa de los aficionados sería el conjunto visitante el que se pondría por delante en el marcador gracias a un tanto de su defensa central Martin Skrtel (minuto 4′), tras un centro de tiro libre de costado. Coutinho levantó la pelota, Suárez ganó de cabeza y en el recorrido del balón a la portería, Skrtel puso su pie y para confirmar la anotación.
No tardó mucho la reacción de los locales que a través del belga Eden Hazard (17′ minutos), consiguió igualar nuevamente las cargas. Los ‘blues’ salieron tocando en corto desde el fondo, Oscar encaró, el defensa lo detuvo pero la pelota quedó servida en la frontal y Hazard, sin pararla, sacó un remate colocado que terminó tocando la red.
Motivados por el empate, los jugadores del Chelsea tomaron el control del juego y con un gol de Samuel Eto’o (34′ minutos), lograron darle vuelta al marcador. Oscar generó toda la jugada por el lado derecho del área, tiro la pelota atrás y el delantero camerunés sólo tuvo que ganar la posición y darle con la punta de su pie izquierdo dirección de portería.
Esta nueva victoria del cuadro londinense ratifica mi teoría de que los equipos de Mourinho se permiten perder cualquier partido, menos los más importantes y los que sobre el papel son clásicos regionales o de la competición en la que esté dirigiendo.