El delantero colombiano se mostró motivado de cara al proceso de recuperación y esperanzado de poder llegar bien al Mundial de Brasil.
Falcao García compareció ante los medios de comunicación durante una rueda de prensa celebrada en la tarde este lunes colombiana en una de las salas del hospital ‘Ordem da Trindade’ de Oporto, Portugal, en el que fue operado por el prestigioso cirujano José Carlos Noronha, quien también hizo presencia durante la interacción con los periodistas.
Radamel acudió en muletas al sitio de encuentro (acompañado por Carlos Ulloa, médico de la selección nacional) y no tuvo problemas para hablar sobre la lesión de ligamento cruzado, su proceso de recuperación que apenas comienza y las posibilidades de que alcance a estar entre los convocados por Colombia para el Mundial Brasil 2014.
Asimismo, el delantero del Mónaco abogó por trabajar pacientemente sin prisas, a pesar de que el Mundial comienza el 12 de julio -a menos de seis meses- y la lesión que padece puede obligarle a estar de baja al menos medio año, teniendo en cuenta la gravedad de la misma.
«Trato de no pensar de aquí a tres o cuatro meses, intento centrarme en el día a día. No me puedo saltar protocolos, plazos y tiempos», resaltó el goleador samario.
‘El Tigre’ mostró una actitud constructiva, aunque asumió que el momento de la grave lesión sucedió «en un momento importantísimo» de su carrera agravado por la proximidad del Mundial de Brasil.
«Intento aprovechar al máximo para aprender y crecer como persona», dijo Falcao, quien pronosticó que este episodio le «hará más fuerte».
El momento de la lesión fue narrado por el futbolista: «La vi, la analicé (…) En el momento que sucedió (el percance) yo sentí que algo había pasado (…) Traté de no mirarla más porque me causa mucha impresión», relató.
Finalmente, dejó claro que ya dio vuelta a la pagina porque estas son «situaciones que en el fútbol no se pueden controlar», admitió mientras abogó por no dar más vueltas al asunto, pues «es algo que no se puede resolver».
