Daniel A la actual rotura de ligamentos en su rodilla izquierda, se le suma que en 2003 se lesionó los ligamentos del tobillo y en 2006 estuvo ocho meses fuera por falencias en su pierna derecha.
Pese a ser una persona muy profesional, disciplinada, dedicada, con excelentes hábitos de vida y con una rutina deportiva saludable, Falcao García ha sufrido en varias ocasiones lesiones graves que lo apartado de la actividad física durante varios meses.
El caso más reciente lo vive actualmente a raíz de una rotura del ligamento interno de su rodilla izquierda, que lo mantendrá unos seis meses alejado de las canchas y que no le permitiría llegar en forma al Mundial Brasil 2014, donde se esperaba fuera de una de las principales figuras y aspirantes al botín de oro.
La noticia tiene consternada al país y me ha obligado a revisar en su historial médico que otro tipo de lesiones ha sufrido Radamel durante su carera profesional. Sorprendido me he que dado al darme cuenta que en total ya son tres las complicaciones graves que ha sufrido el ariete samario y que lo han mantenido por fuera de los terrenos de juego durante periodos prolongados.
La primera lesión grave de Falcao García tuvo lugar en 2003. Poco antes del Mundial Sub-17 de Finlandia, cuando ya estaba convocado por el seleccionador colombiano, Eduardo Lara, el delantero sufrió una rotura de ligamentos en el tobillo derecho que le obligó a perderse la competición, tal y como podía suceder este año con el certamen de Brasil.
Casi tres años después, Falcao sufrió una nueva lesión, esta vez en ligamento cruzado de la rodilla derecha -la misma que ahora ha sufrido en la rodilla izquierda-. Fue en enero de 2006, cuando ya militaba en el primer equipo del River Plate de Argentina, donde terminó siendo ídolo.
«Fui a correr una pelota larga, quise frenar, pero el peso del cuerpo hizo que la rodilla se me fuera», declaró entonces Radamel, que estuvo fuera de los terrenos de juego durante ocho meses, en la que ha sido su recuperación más extensa.
La mala suerte ha vuelto a hacer de las suyas con el atacante cafetero y ahora lo ha privado de terminar su primera temporada con el Mónaco, de continuar el camino de preparación previo al Mundial y, lo peor, de formar parte de la Selección Colombia que buscará hacer historia en Brasil 2014 durante su regreso al torneo más importante del deporte rey.