Aunque estuvo equilibrado el juego, el seleccionado germano se impuso para ratificar porqué es uno de los principales favoritos para el Mundial de Brasil.
La selección de Alemania hizo valer su condición de local y terminó superando por la mínima diferencia (1-0) a su similar de Chile, en uno de los partidos amistosos más llamativos de esta primera fecha FIFA del año y que marcó el inicio del camino preparotorio para estos combinados.
La única anotación del compromiso fue obra del habilidoso Mario Götze (minuto 16′), tras habilitación del criticado Mesut Özil. El creativo del Arsenal filtró en el área un preciso pase a ras de piso que cayó en los pies de Götze. El volante del Bayern, «odiado» por los hinchas del Borussia, echó su cuerpo hacía atrás, remató sutilmente con la izquierda y clavó la pelota en uno de los ángulos superiores, imposible para el portero Bravo.
Con esa ventaja mínima ambos conjuntos se marcharon a los camerinos en busca de dar solución a algunos problemas evidenciados sobre el césped durante el primer episodio. Alemania supo controlar el juego con la tenencia del balón, mientras los chilenos buscaron a través del pelotazo romper la resistencia del rival.
Para la segunda parte reaccionaron los australes, durante gran parte se hicieron dueños de la pelota, generaron las mejores opciones de gol y al final la mala puntería no les permitió llevarse algo más en esta visita, que deja en evidencia el poderío de estos selecciones de cara a la próxima cita orbital.