El portero español se rompió el ligamento cruzado de su rodilla derecha y eso lo aparta de las canchas por lo menos seis meses.
Con el Mundial a la vuelta de la esquina, selecciones y jugadores que disputarán el certamen viven más pendientes que nunca del tema de las lesiones. A pocos meses de que inicie la cita orbital cualquier molestia física podría impedir estar presente en ella y por eso se trabaja con mucha más precaución de lo habitual.
Sin embargo, en algunos casos el cuidado no sirve de mucho y la necesidad de tener que competir siempre al máximo nivel termina cobrando caro. Eso es precisamente lo que ha pasado con jugadores como Walcott, Khedira, Suazo, Rossi o Falcao, quienes ha puesto en duda su presencia en Brasil 2014 por culpa de alguna delicada lesión que los mantendrá varios meses al margen de la actividad deportiva.
Las lesiones de los cracks han encendido una alerta Mundial que espera, para bien del fútbol y del espectáculo que gusta a los fanáticos, apagarse algunas semanas antes de la próxima cita orbital. La idea es que cada equipo pueda contar con sus mejores armas y no tenga que lamentarse la ausencia de alguna «estrella» que dará mucho más nivel al torneo global.
Lamentablemente estas precauciones no han sido del todo efectivas y muestra de ello es lo que este miércoles ha vivido Víctor Valdés, quien se suma a la lista de los que se perderán el Mundial por lesión, tras no poder terminar el partido liguero entre Barcelona y Celta de Vigo, valido por la jornada 30.
El portero español se lesionó en los primeros minutos del partido en una jugada fortuita. El meta acababa de blocar en dos tiempos un chut de falta de Orellana y al pisar el césped antes de parar definitivamente el balón cayó con gestos ostensibles de dolor, echándose las manos a su rodilla derecha.
La asistencia médica que saltó inmediatamente al campo no se lo pensó dos veces e hizo gestos de cambio al banquillo. Víctor fue retirado en la litera móvil y dejó su puesto a José Manuel Pinto, quien estuvo al altura del compromiso.
Minutos más tarde de lo sucedido, la prensa catalana confirmó las peores previsiones: Víctor Valdés se rompió el ligamento cruzado de su rodilla derecha y estará como mínimo seis meses alejado de las canchas. Lamentable noticia para el arquero ibérico que se pierde el Mundial y para el Barcelona que deberá afrontar la recta final de la temporada sin una de sus fichas claves.