Los goles de Bale y Morata permitieron que el conjunto merengue cerrara de buena manera ante su gente la participación en esta temporada.
Ante los más de 50.000 seguidores que se dieron cita en el Santiago Bernabéu, Real Madrid derrotó con mucha superioridad (3-1) al Espanyol, en el partido que abrió las acciones de la jornada sabatina en esta fecha 38 (última del calendario) de la Liga Española.
Con este resultado, los hombres de Ancelotti cierran la campaña con una victoria que le representa tres unidades y que los deja con 87 puntos en la segunda posición de la tabla, a la espera de lo que pueda suceder en el partido «final» que disputarán los líderes Barcelona y Atlético de Madrid.
Pese a que hizo todo bien, el conjunto merengue hasta el final del primer tiempo no pudo con el visitante. Tuvo ocasiones, pero no estuvo demasiado preciso en los remates a portería y en algunas situaciones cerca del área, controlados de buena manera por el bloque defensivo del Espanyol.
Pensé que le costaría más al cuadro blanco reponerse a la ausencia de última hora de Cristiano Ronaldo, que se lesionó durante el calentamiento. El portugués se resintió de su lesión antes del encuentro e Isco ocupó su lugar en el once titular de Ancelotti.
Para la etapa complementario los técnicos movieron sus fichas, probaron con algunas variantes y eso permitió que Gareth Bale (minuto 64′), abriera el marcador en favor del local. Gran asistencia de Benzema entre líenas para Bale, el control dirigido fue muy largo, pero no le molestó para sacar un remate cruzado de pierna derecha que no pudo detener Casilla.
Continuaron las sustituciones y siguieron llegando las anotaciones, esta vez gracias a Álvaro Morata (minuto 86′), para ampliar las diferencias. Contragolpe letal del Madrid conducido por Ramos, prosiguió Di María y éste le regaló el gol a Morata, que no falló con la portería vacía. Casilla quedó vendido con el achique previo.
Luego llegó el descuento del visitante por intermedio de Luis Pizzi (90′ minutos), que acabó con la resistencia de Casillas tras una gran asistencia de García desde el extremo derecho del área.
Parecía que el partido acaba así, sin embargo en la recta final apareció nuevamente Álvaro Morata (minuto 90+1′), para poner cifras concretas en el electrónico. Di María galopó desde el centro del campo y regaló otra vez el tanto a su compañero.
