El anfitrión del Mundial dio una nueva alegría a sus aficionados y despejó algunas dudas de su juego, faltando pocos días para el pitazo inicial.
Complaciendo a los miles de seguidores que se dieron cita en el estadio de Governo del Estado de Goiás, la selección de Brasil hizo valer su condición de favorito en la Copa del Mundo goleando (4-0) a su homologa de Panamá, en un partido amistoso que abrió las acciones de la última jornada previa a la cita orbital.
Aunque los primeros minutos fueron de dominio total para los canaleros, la magia de Neymar (minuto 26′), permitió que los brasileño se pusieran en ventaja. El delantero del Barcelona fue derribado por Tejada al borde del área cuando estaba a punto de finiquitar un contragolpe. El árbitro sancionó el tiro libre y Neymar sacó un exquisito cobro de su manual.
Tras el primer tanto se montó en el juego el combinado local y eso le permitió a otro catalán, Daniel Alves (minuto 40′), aumentar las diferencias en el marcador. Tocaron y tocaron por todo el campo hasta que la pelota cayó en la banda derecha. El lateral derecho del Barça rompió en diagonal hacia el área y sorprendió a todos con un colocado remate que acabó besando la red.
Nada más empezar la segunda parte los cariocas sellaron rápidamente la victoria por intermedio de Hulk (minuto 46′), tras una asistencia de lujo de Neymar. La nueva estrella del país anfitrión se inventó un taco que desarmó la defensa rival y que le permitió al atacante del Zenit convertir sutilmente con la parte externa de su pie izquierdo.
Faltaba uno más para cerrar la gran actuación de Brasil y así lo entendió el habilidoso William (minuto 72′), se apuntó otro golazo. La tocaron todos los jugadores tras un robo en zona alta. Neymar filtró entre líneas para la descolgada de Maxwell que eludió al portero con un puntazo. En el centro del área apareció el volante del Chelsea para convertir a placer.