Daniel El futbolista portugués no comparte la idea de jugar el sábado y con un día menos de descanso que los jugadores del Barcelona.
Tras abrir el camino de la victoria ante Liverpool y encarrilar el triunfo histórico del Real Madrid en Alfield Road, Cristiano Ronaldo compareció ante los medios en los pasillos de prensa del estadio y desde allí se refirió a lo que será la disputa del primer Superclásico liguero de la temporada.
El luso mostró su queja por el poco descanso que tendrán él y sus compañeros para preparar el partido ante el Barcelona: «Un futbolista de alta competición sabe que dos días de descanso no es igual que tres días, pero no es excusa porque vamos a jugar bien y vamos a ganar», dijo haciendo referencia a que los futbolistas del ‘eterno’ rival jugaron su partido de Champions el martes.
¿Pero lo entiendes? Le preguntaron. «No lo entiendo», contestó. Y aseguró: «Se tendría que tener más cuidado con estos detalles. 24 horas de diferencia para descansar son muchas». Lo llamativo es que la estrella merengue no fue el único que se quejó ante esta situación, varios de sus compañeros también se mostraron afectados por el ajustado calendario.
Cambiando un poco de tema, CR7 se mostró convencido tras ganar al Liverpool por 0-3 de que terminará batiendo el récord de 71 tantos que conserva Raúl González. «No estoy preocupado por el récord de goleadores de la Champions, sé que lo batiré. Leo Messi y yo estamos muy cerca. Lo mejor es que el equipo tiene nueve puntos», dijo el portugués a la cadena británica ‘BBC’ tras el partido europeo.
Cristiano, que no había marcado en Anfield, subrayó que su primer tanto en ese escenario fue «muy especial» y se mostró «muy feliz» tras un partido que deja al conjunto blanco como líder de su grupo en solitario, a un paso de la clasificación para los octavos de final. «Sabíamos que Anfield iba a ser un lugar difícil, pero estuvimos fantásticos en los primeros 45 minutos y merecimos ganar», razonó el portugués.
Por último, se refirió a su cambio con un mensaje que llevaba doble sentido: «No tengo que pactar nada con el entrenador sobre la sustitución. Ha hecho bien porque tenemos un partido importante», haciendo referencia a aquel día en el que Messi se negó a ser cambiado por Luis Enrique durante el compromiso de Liga ante Eibar.