El conjunto bávaro se impuso en una nueva versión del clásico alemán, extendió su prologando invicto y mandó a posición de descenso a su eterno rival.
En un Allianza Arena repleto y a reventar, Bayern Múnich derrotó (2-1) al Borussia Dortmund, en el partido que cerró las acciones de la jornada sabatina en esta décima fecha de la Bundesliga. El colombiano Adrián Ramos jugó los últimos 10 minutos del compromiso.
Fue necesario esperar hasta bien avanzada la primera parte para que se abriera el marcador y para que Marco Reus (minuto 30), pusiera en ventaja al visitante. Buen centro enviado desde la banda derecha y Reus remató a las mil maravillas de cabeza para vencer la resistencia bávara. Había tenido más y mejores opciones el Bayern, pero esto es lo bonito del fútbol.
Con esa diferencia mínima se concluyó un primer episodio para muchos sorpresivo. Por el momento en el que llegaba cada equipo se esperaba mucho más dominio de los hombres de Guardiola, sin embargo, los dirigidos por Klopp lucieron bastante bien y muy convencidos de que este era un partido aparte. En todo caso, más allá del resultado había habido buen espectáculo antes del descanso.
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Para la etapa complementaria salieron mucho más decididos los hombres locales y eso le permitió a Robert Lewandowski (71 minutos), imponer nuevamente las tablas. Zapatazo del polaco desde la frontal del área para igualar las cargas. Había desperdiciado muchas ocasiones, pero finalmente encontró premio gracias al ex-Borussia.
Parecía que todo terminaba igualado y fue entonces cuando apareció Arjen Robben (85 minutos), para darle vuelta al electrónico en favor de los locales. El holandés cambió por gol una dudosa pena máxima sancionada por el colegiado. Subotic agarró a Ribéry dentro del área y el francés no desaprovechó la oportunidad para dejarse caer. Finalmente no hubo tiempo para más y los tres puntos fueron para el Bayern Múnich.