Con goles de Nacho y Marcelo, Real Madrid se impuso (2-1) ante Galatasaray, en la disputa del tradicional trofeo Santiago Bernabéu.
Al rededor de 60.000 espectadores se dieron cita en el estadio blanco para presenciar este partido amistoso que, entre otras cosas, contó con la presencia del colombiano James Rodríguez. El centrocampista cucuteño, que ingresó en la segunda parte, más precisamente a los 57 minutos, en lugar de Jesé Rodríguez, fue ovacionado en prácticamente todas las gradas del escenario.
Pensar que no fue necesario esperar mucho tiempo antes de que apareciera Nacho Fernández (minuto 17), con la apertura en el marcador. Centro de Modric botado desde el corner izquierdo. La pelota llegó bombeada al primer palo y allí se impuso el defensa español con un testarazo. Nada pudo hacer Fernando Muslera para evitar el primer gol de los merengues.
Con esa diferencia mínima se bajó el telón de una primera parte entretenida y marcada por la superioridad del conjunto local. La posesión, el dominio, las ocasiones de gol, en fin, todo corrió por cuenta de los jugadores blancos que además estuvieron impecables en la presión alta. Pese a ello, los turcos contaron con un par de claras oportunidades que fácilmente pudieron cambiar el rumbo del encuentro.
Para el segundo reaccionar los visitantes a raíz de las modificaciones y a raíz del aporte de Wesley Sneijder (minuto 52), que impuso nuevamente la igualdad. Podolski conectó con Sneijder, que controló con la derecha y disparó con la izquierda desde la frontal para vencer la resistencia de Keylor Navas. Buen gol del volante holandés que cumplió con la infalible «ley del ex».
Con las tablas transcurrió gran parte de un periodo complementario que pintaba para los penales y que sólo pudo ser definido por Marcelo (minuto 80), que se apuntó un golazo. Tremenda jugada individual del lateral brasileño, que arrancó desde la izquierda y se fue tirando hacía el centro, mientras dejada rivales por el camino, para definir muy bien ante Muslera. Preciosa anotación que le dio la tranquilidad a Rafa Benítez y el esperado triunfo al Real Madrid, que en todo caso sufrió más de la cuenta.
