En partido valido por la jornada 18 de la Liga Española, el Barcelona no pudo pasar del empate (0-0) ante el Real Club Deportivo Espanyol.
Las tablas se mantuvieron hasta el final de una primera parte marcada por el acertado planteamiento táctico del local. Los anfitriones apostaron por la presión alta, la ocupación de espacios en el centro del campo y el contragolpe como arma ofensiva, para hacer bastante incomodo el despliegue de un equipo visitante que hasta antes del descanso no encontró la formula para desequilibrar el juego. En todo caso, la expectativa de cara al complemento se venía en aumento entre los presentes en el siempre eufórico Estadio Cornellà-El Prat, que esta vez no lució tan lleno como de costumbre.
Desafortunadamente para el espectáculo, el segundo tiempo terminó siendo una fotocopia del primero, hasta el punto en el que ninguno de los dos conjuntos consiguió desequilibrar la balanza en el tanteador. Pese a que ambos entrenadores movieron sus fichas e intentaron marcar diferencia desde el banquillo, finalmente pesó mucho más el orden táctico de los jugadores locales que extendieron su buen rendimiento hasta el pitazo definitivo.
Así las cosas, cada equipo se llevó un punto y eso le representó a los dirigidos por Luis Enrique mantenerse en el primer lugar de la tabla de posiciones con 39 unidades y un partido menos, a la espera de lo que pueda pasar con Atlético de Madrid y Real Madrid en el complemento de la fecha. Por su parte, los hombres de Constantin Galca se quedaron con 21 puntos en la parte media-baja de la tabla. Amargo inicio de 2016 para este Barcelona que el año pasado ganó cinco de los seis títulos que disputó.
