Daniel El estratega argentino reconoce que al centrocampista colombiano hay que hacerle sentir importante para que tenga su mejor rendimiento.
Tras varios meses en el anonimato, teniendo en cuenta que Banfield no atraviesa su mejor momento, Julio César Falcioni Capdevila ha vuelto a ser protagonista en el fútbol mundial. El ex-futbolista gaucho reapareció en las principales noticias del planeta deportivo por intermedio de una reciente entrevista concedida a medios españoles.
El laureado técnico argentino compareció ante los periodistas del diario ‘Marca’ para analizar la actualidad futbolística y recordar los inicios deportivos de James David Rodríguez Rubio, a quien hizo debutar en el año 2009. Juntos lograron el único título que tiene el club en sus 120 años de historia y todo gracias a que Falcioni le modificó la manera de jugar al cucuteño, según como lo cuenta él mismo. Te dejo con sus declaraciones.
James Rodríguez: «Le hemos tratado con muchísimo afecto. Cuando nosotros llegamos al club nos encontramos con un ‘pibe’ de 17 años que tenía unas condiciones asombrosas. Apreciamos que sus condiciones técnicas podían mejorar y le cambiamos su posición en el campo porque pensábamos que mandándolo a la banda le podíamos sacar mejor provecho a su talento. Jugaba de ’10’ y aquí esa posición requiere de mucha responsabilidad y no creíamos que él tenía que soportar eso».
Protagonismo: «Buscamos evitar que eso le obnubilara en su crecimiento y le dimos un papel menor importante dentro del equipo para que vaya creciendo poco a poco y se sintió muy cómodo. Pensamos en ese momento que podía desarrollar mejor su juego sobre la banda, en una posición fija y sin que le pongan una marca especial, sin la necesidad de que esté pensando siempre pensando en crear juego. Con eso le quisimos dar más libertad a su juego, lo fue entendiendo en los entrenamientos, supo aprovechar su condición física, su visión como buen jugador que es y mire hasta donde llegó».
Real Madrid: «Me imagino que James tiene un peso enorme sobre su espalda por la magnitud que significa el club donde está. Aún así, él sabe que tiene un futuro muy grande por delante y tiene la personalidad suficiente para salir adelante porque conozco su capacidad. A James hay que mimarlo. Yo siempre le daba una caricia -cuando hacía lo que buscábamos- y una bofetada -para despertarlo y que no se duerma en los halagos- con el fin de que no baje su rendimiento. James es un jugador de una estirpe de los que no aparecen todos los día. Hay que hacerle sentir importante. Hay que saber darle el valor adecuado por todo lo que produce, porque es terrible lo que un jugador puede rendir cuando lo haces sentir importante».
Futuro: «Siempre dije que James no tenía un techo futbolístico y que no sabía donde iba a terminar su progresión. Sigo afirmando lo mismo muchos años después: James no tiene un techo futbolístico. Con él no me equivoqué. Con su trabajo y su honestidad ha conseguido llegar hasta donde está porque siempre se preocupó por crecer. Aún hoy todavía le falta mucho para dar. Fue goleador de un Mundial con 24 años, aún le quedan dos Copas del Mundo por delante. Un jugador llega a su plenitud futbolística a los 27 ó 28 años. Tiene condiciones para jugar donde quiera. Fue titular y figura de un equipo campeón en Argentina con 18 años, en un fútbol donde hay muchos roces y es difícil sobresalir. Se sobrevivió a eso, puede destacar dónde él quiera».