Enrique Granados, futbolista del Almoradí de España, agredió desquiciadamente al colegiado luego de que le mostrara la tarjeta roja.
La cuarta jornada futbolera en fin de semana de abril ha estado marcada, como de costumbre, por las atajadas, golazos, jugadas y bloppers, entre otras cosas, que se vivieron en los diferentes lugares del mundo donde ha habido actividad internacional. En otras palabras, marcada por los hechos que han derivado de la actividad en competiciones locales como la Bundesliga, la Liga BBVA y la Premier League, que han entrado en su recta final.
Uno de los sucesos que se presentó durante las últimas horas y que ha dado mucho de que hablar en la prensa deportiva mundial es el protagonizado por Enrique Granados Vázquez durante la victoria del Club Deportivo Almoradí (1-2) ante el Villajoyosa Club de Fútbol, en partido valido por la más reciente jornada del Torneo Regional Preferente de la Comunidad Valenciana. El centrocampista visitante perdió los papeles luego de que el árbitro le mostrara la segunda tarjeta amarilla.
En realidad la jugada fue muy confusa porque el futbolista quedó tendido sobre una de las líneas laterales y hasta allí llegó el juez central para expulsarlo. Pese al cabezazo que se comió el colegiado Morales Lorente, que tuvo lugar en los minutos finales de encuentro -el árbitro mostró la segunda cartulina al jugador al entender que estaba perdiendo tiempo-, el partido se reanudó y pudo jugarse hasta el final. Sin embargo, se espera un sanción ejemplar para el artífice de este cabezazo que pudo terminar peor.
