Leigh Griffiths, futbolista del Celtic de Escocia, es el autor de este golazo y esta celebración que le están dando la vuelta al mundo.
La cuarta y última jornada futbolera en fin de semana de agosto ha estado marcada, como de costumbre, por las atajadas, golazos, jugadas y bloppers, entre otras cosas, que se vivieron en los diferentes lugares del mundo donde ha habido actividad internacional. En otras palabras, marcada por los hechos que han derivado de la actividad en competiciones locales como la Liga Águila de Colombia y la Liga Santander de España, e internacionales como los partidos amistosos entre selecciones.
Uno de los sucesos que se presentó durante las últimas horas y que ha dado mucho de que hablar en la prensa deportiva mundial es el protagonizado por Leigh Griffiths durante la goleada del Celtic Football Club (4-1) ante el Aberdeen Football Club, en partido valido por la cuarta jornada de la Scottish Premiership de Escocia. El centrocampista local se llevó todos los aplausos tras marcar el mejor gol del encuentro y por acordarse de un niño fallecido durante su celebración.
Griffiths abrió el marcador con un precioso tanto que incluyó un caño al primer toque con el pie derecho y un zapatazo con el izquierdo que se coló por la escuadra de la meta rival. El futbolista escocés salió corriendo a toda velocidad hacia su propia portería para celebrar el gol. Tras cruzar todo el campo, Leigh cogió una camiseta que había dejado escondida detrás de su meta en recuerdo de Kieran McDade, un niño de 13 años del modesto Dunbeth Football Club que murió por un paro cardíaco durante un entrenamiento.
