Con una nomina alterna, el FC Barcelona empató como visitante (1-1) al Hércules de Alicante, en los dieciseisavos de final de la Copa del Rey.
Para sorpresa de muchos, especialmente de la colonia de hinchas del equipo azulgrana que hicieron presencia en el Estadio José Rico Pérez, el primer episodio concluyó con un frío empate a ceros que reflejaba las pocas emociones brindadas sobre el terreno de juego. Si bien es cierto que el planteamiento táctico-defensivo de los locales estaba obteniendo su premio, también está claro que la deslucida actuación de los visitantes tuvo mucho que ver en esta igualdad que, en todo caso, prometía muchas emociones de cara al complemento.
Efectivamente, tras el descanso ambos conjuntos salieron un poco más decididos en busca del encuentro y eso le permitió a David Mainz (52 minutos), poner en ventaja al Hércules. Balón centrado desde la izquierda, la tocó Juanma en primera instancia y Mainz embocó con el pecho en el segundo palo. No tardó mucho la reacción la del Barcelona o mejor dicho la aparición de Carles Aleñá (minuto 58), con el tanto de la igualdad. Robó Rafinha la pelota y la cedió para el debutante Aleñá, que le pegó seco desde más de 20 metros con la pierna izquierda.
Con este resultado los dirigidos por Luis Enrique suman un punto, se llevan a casa un gol de visitante (que en caso de empate en la serie vale doble) y llegan con cierta ventaja a lo que será el partido de vuelta del próximo miércoles 21 de diciembre en el Camp Nou. Ahora toca darle vuelta a la pagina, esperar por el complemento de la jornada y pensar en lo que será el superclásico de este sábado ante el Real Madrid, bajo el marco de la jornada 14 de la Liga Santander de España.
