El Comité Consultivo de la FIFA aprobó la ampliación del número de equipos clasificados al torneo más importante del mundo.
Cuando parecía que los escándalos se habían terminado y que arrancaba así una nueva era sin mayores polémicas en la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA), durante los últimos días se ha venido hablando de una noticia de impacto mundial que marcará el inicio del mandato de Gianni Infantino, su máximo dirigente.
Evidentemente estamos hablando de la polémica propuesta que busca incrementar a 48 selecciones el número de clasificados para el Mundial de Fútbol y que en las últimas horas ha sido aprobada por los directivos del principal organismo deportivo. El Consejo Consultivo dio su visto bueno a extender el número de selecciones que participarán en la Copa del Mundo 2026. Es una idea que defiende Gianni Infantino, pero que nació en la efímera candidatura a la presidencia de la FIFA de Luis Figo.
El presidente de la FIFA apuesta por un sistema de competición que consta de 16 grupos de tres equipos. Las dos mejores selecciones de cada grupo avanzarán a dieciseisavos y, desde ahí hasta la final, eliminatorias. En total, se jugarán 80 partidos. Las modificaciones no acaban ahí. Las tres primeras eliminatorias, en caso de acabar en empate, se resolverán en lanzamientos de penaltis. Las prórrogas quedan reservadas para la semifinal y la final. El torneo comprende 12 estadios y 32 días de competición.
Nada varia en cuento a las infraestructuras, pero con este panorama y, a la espera de definir el nuevo Ránking FIFA, el debate se centra en el cupo por Confederación para el nuevo Mundial. Todo apunta a que quedará de la siguiente manera: 16 cupos para UEFA (Europa), 9+1 para la CAF (África), 8+1 para la CAF (Asia), 6+1 para Conmebol (Sudamérica), 6+1 para Concacaf (Norteamérica) y una para OFC (Oceanía).
La Copa del Mundo aumentaría sus ingresos netos hasta los 3.950 millones de euros, en vez de los 3.345 millones de euros que se estiman para el Mundial de Rusia 2018, según las proyecciones realizadas en diversos estudios, aumentando los gastos en unos 300 millones de euros. Los ingresos de los derechos de televisión crecerían en 480 millones de euros y los del marketing en 350 millones de euros, aportando a este nuevo Mundial unos 600 millones más de ingresos.