Shoot Outs en vez de penaltis y partidos sin fuera de lugar, son algunos de estos cambios que plantea y explica Marco Van Basten a través del diario ‘BILD’ de Alemania.
«Tengo mucha curiosidad sobre cómo funcionaría el fútbol sin fuera de juego. Creo que mucha gente va a estar en contra. Yo estaría a favor porque el fútbol se parece cada vez más al balonmano», asegura el ex del Milan.
En deportes como el hockey o el balonmano ya se practica con éxito esta medida. «La idea es reemplazar la tarjeta amarilla por una penalización de tiempo de cinco o diez minutos. Es difícil jugar 10 contra 11», asegura la leyenda holandesa.
Infantino ya anunció que en el Mundial de 2026 no habrá empates la fase de grupos y serían los penaltis los que decantasen la balanza. Van Basten da una pequeña vuelta a esta idea e introduce los ‘shoot out’ que ya se utilizaron en la MLS entre 1996 y 1999. «Cada equipo tendría cinco intentos. El árbitro pita y el futbolista corre 25 metros hacia la portería. En ocho segundos debe culminar la acción. Esto es espectacular para los aficionados e interesante para los jugadores. En unos penaltis todo acaba en un segundo. En cambio, en los ‘shoot outs’ hay muchas posibilidades: se puede driblar, disparar, esperar la reacción del portero. Se asemeja más a una situación de juego», explica.
Similar a otros deportes, el reloj se pararía cada vez que el balón saliese del campo o hubiese una falta. Es la mejor manera de combatir las continuas pérdidas de tiempo durante los últimos 10 minutos del partido.
El holandés pone al rugby como ejemplo de esta propuesta en la que sólo el capitán tendrá la opción de hablar con el árbitro. Así se evitarían las protestas en grupo tan recurrentes e intimidantes para los jueces.
Van Basten pone como ejemplo al baloncesto en el que el jugador que cometa más de cinco faltas es eliminado. Cree que esta medida cortaría en seco a muchos futbolistas que se pasan el partido cometiendo infracciones y cortando el juego.
«En el fútbol profesional debe seguir el 11 contra 11 en un gran terreno de juego. Sin embargo, en los jóvenes o mayores de 45 años sería perfecto 8 contra 8 en un espacio más pequeño», considera el holandés.
Marco quiere fútbol de calidad y menos partidos. Considera que tantos choques provocan cansancio en los jugadores por lo que penaliza la espectacularidad del juego. Cree que se debe pasar de los 80 partidos que se juegan actualmente por temporada a unos 50.
Es otra de las medidas aprobadas para el Mundial 2026. «Hablamos de uno o dos cambios adicionales en la prórroga», defiende el holandés.
La idea es que los equipos puedan realizar sus variantes sin avisar al colegiado y sin parar el juego, como sucede en el Futsal. En esta medida Van Basten se muestra más cauto al complicar mucho la situación del árbitro puesto que podría desconocer los jugadores presentes sobre el terreno de juego.