Daniel Ricardinho, figura y goleador del Inter Movistar, sorprendió con esta impresionante habilitación que no pudo concretar su compañero.
La segunda jornada futbolera en días laborales de junio ha estado marcada, como de costumbre, por las atajadas, golazos, jugadas y bloppers, entre otras cosas, que se vivieron en los diferentes lugares del mundo donde ha habido acción. Dicho de otra manera, representada por los hechos que han derivado de la actividad en competiciones locales como la Serie A de Brasil e internacionales como el Mundial Sub-20 de Corea del Sur, por mencionar algunas.
Uno de los sucesos que se presentó durante las últimas horas y que ha dado mucho de qué hablar en la prensa deportiva mundial es el protagonizado por Ricardo Filipe da Silva Braga durante el emotivo empate a dos del Club Inter Fútbol Sala (2-2) ante el Fútbol Club Barcelona Lassa, en partido valido como la gran final de la Liga Nacional de Fútbol Sala. El habilidoso jugador local puso las sombras y las luces en un encuentro en el que falló dos penaltis, pero se inventó una genial asistencia de rabona.
Se disputaba el último minuto de la primera parte, Inter perdía por la mínima diferencia, cuando apareció la magia de Ricardinho para darle un respiro a su equipo y devolverle la ilusión a los hinchas. El crack portugués tiró de repertorio para inventarse una asistencia de rabona de más de 20 metros que su compañero Darlan Henrique no pudo finalizar. El compromiso terminó empatado y se tuvo que decidir en los penaltis.