El joven portero italiano no pudo evitar las lágrimas en el vestuario después de ser fuertemente criticado por los seguidores rossoneri.
La segunda jornada futbolera en días laborales de diciembre ha estado marcada, como de costumbre, por las atajadas, golazos, jugadas y bloppers, entre otras cosas, que se vivieron en los diferentes lugares del mundo donde ha habido acción. Dicho de otra manera, representada por los hechos que han derivado de la actividad en competiciones locales como la Bundesliga e internacionales como la Copa Sudamericana, por mencionar algunas.
Uno de los sucesos que se presentó durante las últimas horas y que ha dado mucho de qué hablar en la prensa deportiva mundial es el protagonizado por Gianluigi Donnarumma durante la contundente victoria del Associazione Calcio Milan (3-0) ante el Hellas Verona Football Club, en partido valido por los octavos de final de la Copa de Italia. El guardameta local sorprendió a sus compañeros tras romper en llanto por culpa de las pancartas e insultos que le dedicaron sus propios hinchas.
Los aficionados del Milan le mostraron al prometedor arquero italiano una pancarta en la que le criticaban, mencionando su sueldo, el fichaje de su hermano «parásito» y le pedían que se fuera del club. Al menos, Donnarumma contó con el apoyo del vestuario. La mejor muestra de ello fueron los ánimos que le quiso dar Leonardo Bonucci, capitán del equipo, antes de saltar al campo tras el recibimiento hostil con el que se encontró por parte de la afición desde el mismo calentamiento.
