El centrocampista colombiano cometió la falta que le permitió a Independiente igualar el partido y quedarse con la Copa Sudamericana.
La segunda jornada futbolera en días laborales de diciembre ha estado marcada, como de costumbre, por las atajadas, golazos, jugadas y bloppers, entre otras cosas, que se vivieron en los diferentes lugares del mundo donde ha habido acción. Dicho de otra manera, representada por los hechos que han derivado de la actividad en competiciones locales como la Bundesliga e internacionales como la Copa Sudamericana, por mencionar algunas.
Uno de los sucesos que se presentó durante las últimas horas y que ha dado mucho de qué hablar en la prensa deportiva mundial es el protagonizado por Gustavo Leonardo Cuéllar Gallego durante el deslucido empate a unos del Clube de Regatas do Flamengo (1-1) ante el Club Atlético Independiente, en partido valido como la vuelta de la gran final de la Copa Conmebol Sudamericana. El volante local fue uno de los principales señalados por los hinchas tras cometer un polémico penalti que derivó en el gol de los visitantes.
Independiente, campeón de títulos en Sudamérica -nadie tiene más que ellos-, conquistó la Copa Sudamericana al derrotar a Flamengo por un global de 3-2, tras ganar 2-1 en la ida e igualar 1-1 en la vuelta en el mítico Estadio Maracaná. Gracias a este título, ahora disputarán la Copa Suruga Bank contra el Cerezo Osaka de Japón y la Recopa Sudamericana contra el campeón de la Copa Libertadores, el Gremio Foot-Ball de Brasil. Amarga derrota para los colombianos Gustavo Cuéllar, Orlando Berrío y Reinaldo Rueda.
