Onofre Mejía, volante ecuatoriano, fue despedido del América de Quito por su polémica actuación ante el Club Emelec.
La tercera jornada futbolera en fin de semana de septiembre ha estado marcada, como de costumbre, por las atajadas, golazos, jugadas y bloppers, entre otras cosas, que se vivieron en los diferentes lugares del mundo donde ha habido actividad.
Dicho de otra manera, representada por los hechos más llamativos que han derivado de la acción en los diferentes torneos. Estamos hablando de competiciones locales como la Serie A de Italia, la Superliga de Argentina y la Pemier League de Rusia, por mencionar algunas.
Uno de los sucesos que se presentó en las últimas horas y que ha dado mucho de qué hablar en la prensa deportiva mundial es el protagonizado por Onofre Ramíro Mejía Mero. Sucedió en la dolorosa derrota del Club Deportivo América de Quito (1-2) ante el Club Sport Emelec, en partido valido por la jornada 26 de la Serie A de Ecuador.
Un hecho bastante singular se vivió este sábado en Ecuador. América de Quito, que lucha para no descender, perdió con el Emelec por dos penaltis escandalosos. El último fue cometido por su capitán, Onofre Mejía, quien ha sido despedido por su sospecha actitud.
El futbolista se defendió en la ‘Radio CRE Satelital’ de Guayaquil: «Yo no soy un vendido ni recibí plata de nadie». Esto lo dijo después de que el técnico Luis Espinel le acusara en el vestuario de venderse y de que su compañero Nicolás Dávila publicara un tuit con la imagen de varias manzanas verdes y en medio una podrida.