Moussa Marega, delantero del FC Porto, se negó a seguir jugando tras los ataques racistas de los hinchas del Vitória Guimarães.
Es triste tener que hablar de racismo en pleno siglo XXI. Estamos iniciando una nueva década y se siguen presentando ataques racistas en el fútbol mundial. Muchos han sido víctimas de este fenómeno, entre ellos algunos colombianos.
Infinidad de episodios racistas han manchado el buen nombre del deporte rey a lo largo la historia. El ataque más recientes tuvo como protagonista a Moussa Marega. El delantero del FC Porto abandonó el campo de juego, después de sufrir varios ataques e insultos racistas en el campo del Vitória Guimaraes.
El goleador africano, ex del Vitória, había estallado previamente tras marcar el 1-2 de los dragones en el minuto 60. Primero parecía señalarse el color de la piel y luego recogió una de las sillas que le habían lanzado desde la grada y festejó con ellas la anotación. Esa polémica celebración ante su antigua afición le valió la tarjeta amarilla.
A los 69 minutos fue cuando ya no pudo más ante los silbidos y cánticos de mono llovidos desde la tribuna. De primeras se le vio pedir el cambio mientras su compañero Otávio decía que ‘no’ al banquillo. Le dio igual y enfiló el camino de los vestuarios. Compañeros y rivales trataron de evitarlo. Varios futbolistas le agarraron para no dejarlo marchar. Nadie lo logró.
Ni siquiera Conceiçao y Marcano, en última instancia, pudieron frenarle. Moussa, tras un par de minutos tratando de salir del césped, alcanzó el túnel de vestuarios acompañado de integrantes del staff del Porto. Seguía enfurecido e hizo un par de gestos con sus manos, mientras se dirigía a pleno grito a la tribuna.
Indignación mundial por el caso de Marega
Las imágenes del futbolista franco-maliense saliendo del Estadio Dom Afonso Henriques no tardaron mucho tiempo en hacerse virales. Sin embargo, esta vez las redes sociales sirvieron como escenario para expresar una mensaje de apoyo al jugador. Diferentes entes del deporte mundial han rechazado la actitud de los hinchas del Vitória y le han tendido una mano a Marega.