Las frases más famosas de Mesut Özil estuvieron relacionadas con la indiferencia de Guardiola, las peleas con Mourinho y su salida de la Selección Alemana.
Nació en Gelsenkirchen, Alemania, el 15 de octubre de 1988. Debutó a los 18 años, lleva 14 temporadas como futbolista profesional y ha dejado huella en todos los equipos que estuvo. Actualmente tiene 31 años y es la máxima figura del Arsenal, uno de los equipos más grandes de Inglaterra.
Estamos hablando de un volante de creación inigualable. De un jugador inteligente conocido por su buena técnica, su calidad con el balón y su genialidad dentro del campo de juego. Suma 623 partidos, 113 goles, 240 asistencias y 12 títulos entre sus clubes y selección. Un futbolista único e irrepetible, que ha sido criticado por su displicente forma de ser.
El alemán de origen turco, que llegó al Madrid tras comprobar que Guardiola no hacía ningún esfuerzo por llevarle al Barcelona, ha tenido que luchar dentro y fuera de la cancha. Contra Mourinho, contra su padre, contra la Federación Alemana… Por eso el diario ‘MARCA’ de España ha querido reconstruir su historia, recordando sus confesiones más famosas.
EL DÍA QUE MESUT ÖZIL ‘DEJÓ’ EL FÚTBOL
‘El Mago de Öz’ es uno de los futbolistas con más clase que hemos disfrutado en los últimos años en el fútbol. Sin embargo, en su infancia estuvo a punto de dejar de lado el balón por su otra pasión: el tenis de mesa.
Fui bueno en el tenis mesa, jugué en la escuela cuando tenía 11 o 12 años, durante tres meses dejé el fútbol y gané a todos los jugadores en mi primer torneo.
Pensé que no era lo que quería hacer con mi futuro; me hacía mucha falta el fútbol. No diría que me desenamoré del fútbol, es que en aquel momento me estaba divirtiendo más con el ping pong.
PREFERÍA AL BARCELONA ANTES QUE AL MADRID
A pesar de su devoción por Zinedine Zidane, el Real Madrid puede que no fuera su primera elección, aunque las negociaciones con José Mourinho y Pep Guardiola le sacaron de dudas.
Tras el Mundial-2010 me quisieron Real Madrid, Barcelona, Arsenal, Bayern y Manchester United. Mi favorito favorito era el Barça: ningún otro conjunto jugaba un fútbol tan bonito como ellos.
Pensaba que ficharía por el Barcelona. Pero Guardiola no me hizo saber que me quería, su ausencia me hizo sospechar, decían que estaba de vacaciones.
Mourinho fue muy convincente. Afable. E insistente. Fue todo lo contrario que el entrenador del Barcelona. Así que me decidí por José Mourinho y el Real Madrid.
RELACIÓN DE MESUT ÖZIL CON JOSÉ MOURINHO
Cuando llegó al Real Madrid todo era color de rosa. Conoció a su ídolo Zidane, se llevaba bien con Mourinho y el vestuario le aceptó enseguida. Y sobre el césped dejó unos detalles espectaculares y fue fundamental en la Liga de los Récords 2011-2012.
Estaba realmente nervioso, pero también feliz y agradecido porque el Real Madrid era un club tan grande. Había soñado con jugar allí porque mi ídolo Zinedine Zidane lo hizo.
Cuando eres nuevo en el vestuario estás un poco callado y nervioso por los grandes futbolistas que había allí en ese gran club. Me puse especialmente nervioso cuando conocí a Zidane, eso fue un gran momento para mí.
No es un secreto. Mi corazón late por el Real Madrid. Jugué allí y hasta hoy sigo contando con muchos amigos en el equipo y en el club.
Sin embargo, la última temporada de Mourinho en el Madrid fue una guerra abierta entre el entrenador, apoyado por un pequeño grupo de futbolistas, y los pesos pesados del vestuario, entre los que se encontraban Ramos, Casillas, Pepe y Özil. En varios partidos tuvieron fuertes discusiones verbales que con el tiempo salieron a la luz.
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RACISMO EN LA SELECCIÓN DE ALEMANIA
Tras una foto con el presidente de Turquía, Mesut Özil recibió críticas desde dentro de la Federación Alemana y explotó. Acusó a los dirigentes de racistas y anunció que abandonaba la Selección con la que ganó el Mundial de Brasil 2014.
Con dolor de corazón y después de considerar mucho los recientes acontecimientos, no seguiré jugando con la selección de Alemania debido a que he sentido este racismo y falta de respeto. He vestido la camiseta de Alemania con orgullo, pero ya no.
Soy alemán cuando ganamos, un inmigrante cuando perdemos.
Altos cargos de la Federación Alemana me han tratado con falta de respeto hacia mis raíces turcas y me han acusado injustamente de propaganda política, entones ya basta. El racismo no debería ser nunca, nunca aceptable.
Tengo dos corazones, uno alemán y otro turco. Nací y fui educado en Alemania. ¿Por qué hay gente que sigue sin aceptar que soy alemán?