José Luis Chilavert reveló que Miguel Rodríguez Orejuela lo quería en el cuadro escarlata, pero el Real Zaragoza no aceptó la oferta.
El ex arquero paraguayo volvió a ser noticia en el fútbol sudamericano. Esta vez fue por cuenta de una entrevista concedida al programa ‘Súper Combo del Deporte’ de Cali, en la que habló de su relación con los colombianos. Estas fueron las palabras de Chilavert:
«Colombia siempre se ha caracterizado por tener buenos arqueros, pero si me das a elegir, me quedo con Óscar Córdoba. Por más que también a ese nivel lo pondría a René Higuita, que es mi gran amigo.
Pero realmente los éxitos que ha tenido Óscar Córdoba, obviamente demostró categoría en Boca Juniors, con la selección de Colombia, un portero muy completo, tenía personalidad, le pegaba bien al balón, sabía jugar bien con los pies. Era el prototipo ideal.
A René le gustaba mucho más salir jugando, eludir a los rivales, arriesgaban mucho más. Esa es la diferencia, pero para mí son los 2 mejores arqueros que he visto de Colombia».
«Tuve una hermosa oportunidad de ir a Colombia, una vez, estando en España, en Zaragoza. La gente del América de Cali, el señor Miguel Rodríguez me había llamado en su momento, para dejar Zaragoza e irme a jugar en el América.
Esa fue la posibilidad única que tuve de Colombia, pero en ese momento la gente del Zaragoza no quería dejarme ir, porque era un portero muy joven, con 23 años. Y en ese caso la gente del América de Cali tenía la intención de que estuviera en el fútbol colombiano, no se dio, son situaciones de la vida.
Tuve 4 temporadas en Zaragoza, volví a Vélez Sarsfield en el año 1992. Y pasé 9 años maravillosos en Vélez Sarsfield. Ganamos todo, ya sea torneo local y los torneos internacionales que estaban en juego. Siempre digo que Vélez Sarsfield es mi casa, es como ‘La Casa Blanca’ en donde pasé los mejores años de mi vida».
«Creo que fueron más de 20 goles de tiro libre. Me quedaba pateando 80 balones desde el semicírculo del área grande, con una barrera de muñecos que tiene 1.90 metros de estatura, ponía un chaleco a cada ángulo de la portería y allí le pegaba directo, entonces en los partidos salía bien.
El gol que le marqué a Colombia en El Campín, de Bogotá, fue un ejemplo terrible, más teniendo a Óscar Córdoba, un portero extraordinario, y con los jugadores que tenía Colombia, pero él se confió a poner pocos hombres en la barrera, como me veía tan lejos; y yo pensaba al revés, que jugando en altura, con cancha mojada pegándole con comba y picándole adelante iba a ser un gol.
Y salió perfecto, a tal punto que la gente que estaba en el estadio me aplaudió. Eso es lo lindo, el reconocimiento de la gente de Colombia con ese gol extraordinario, hoy en día es difícil que un arquero pueda hacer esos goles.
«Hace dos semanas me inició una demanda por difamación, injuria y calumnia, el 16 de junio tenemos la primera prueba de conciliación, por la cual ya di orden a mi abogado. Vivo en Buenos Aires y por cierre de fronteras obviamente no puedo estar, de que no hay conciliación, vamos directo a juicio oral, él también quiere lo mismo.
Voy a presentar todas las pruebas de la mala administración de Domínguez que tiene al frente de la Conmebol, porque el mundo del fútbol tiene que saber que hoy en día los clubes están penando en Sudamérica y estos personajes se vuelven ricos. Me voy a dar el lujo de pedirle todo el informe de la gestión de Juan Ángel Napout, paraguayo que estuvo presidiendo la Conmebol el año 2015, hoy en día preso en Estados Unidos por el caso Fifa Gate.
Con esta denuncia me da la oportunidad de pedirle todo lo que todo el mundo sabe, pero que nadie se anima. Así como dejé un legado en el arco, voy a dejar un legado por enfrentarme con estos personajes que están matando el fútbol sudamericano».
