David González reveló que estuvo a punto de hacer trampa para que Carlos Tévez obtuviera su licencia de conducción.
Dicen que el mundo es un pañuelo en el que cualquier cosa puede pasar. Y el fútbol no es ajeno a esta dinámica. El deporte rey está lleno de anécdotas e historias increíbles que, en el momento menos esperado, nos sorprenden a todos.
Por ejemplo, quién se iba a imaginar que un jugador colombiano estuviera dispuesto a hacer trampa para ayudar a uno de los mejores futbolistas del mundo. Se trata de David Gónzalez, quien compartió vestuario con Carlos Tévez en el Manchester City. No solo eso. Fueron vecinos y buenos amigos durante aquella época en Inglaterra.
Aprovechando que hace poco anunció su retiro del fútbol, en el programa ‘El VBar’ de Caracol Radio entrevistaron al ex-arquero antioqueño. Le preguntaron por su experiencia en la Premier League y, obviamente, por su relación con el delantero argentino. Estas fueron las palabras de David González:
PROBLEMAS CON EL INGLÉS
«Yo tuve la oportunidad de estar en el Manchester City con Carlos Tévez y todos ustedes saben que él es un tipo que estuvo años en Inglaterra y nunca aprendió el idioma. Resulta que en una época yo tuve que sacar la licencia de conducir en Inglaterra y hay que hacer un examen teórico primero, obviamente todo es en inglés».
LICENCIA DE CONDUCCIÓN
«A Carlos estaban intentando sacarle la licencia de conducir porque ya se le había vencido la argentina. Entonces se dieron cuenta de que yo la había sacado la mía e hicieron un arreglo para que yo apareciera como el traductor de Carlos para ir y presentar el examen por él. A fin de cuentas, a David González no lo conocía nadie en Manchester».
AYUDA DE DAVID GÓNZALEZ A CARLOS TÉVEZ
«Yo hablé con Carlos y le dije: Vamos juntos, hacemos que yo soy el traductor, hacemos el examen y toda la cosa. Carlos lo primero que me dijo fue: ‘No, yo no quiero hacer eso, me quiero ir de este país porque estoy aburrido y no voy a sacar licencia'».
PROBLEMAS CON LA JUSTICIA
«No la sacó y al final se terminó quedando dos o tres años más. Un día lo pararon por falta de licencia, le metieron una multa terrible, lo hicieron pagar trabajo comunitario y tuvo que traerse a un amigo de Argentina para que fuera el chofer».
El ex-guardameta cerró la anécdota con una reflexión de cómo los clubes hacen cosas que está por fuera de las reglas con tal de tener a un jugador bueno en la plantilla y poner a disposición los medio necesarios para mantenerlo contento.