Falcao García recordó que es un hombre de fe y presumió de su relación con Dios, quien le ha dado fuerzas para seguir luchando.
El delantero colombiano sigue siendo noticia en el fútbol mundial. Tras abandonar el Galatasaray y fichar por el Rayo Vallecano, Radamel concedió una emotiva entrevista a la prestigiosa revista ‘Libero’ de España. Estas fueron las palabras de Falcao:
SU INFANCIA
«Estuve siempre de un lugar a otro, desde muy pequeño fui el extranjero en todos lados, el nuevo en los colegios. Todo aquello fue una etapa de preparación para lo que después me iba a venir. Lo vivía a través de mi padre y eso era lo que yo también deseaba para mi vida. Tuve una preparación para vivir en Argentina, España. Y tener una adaptación más rápida».
PRIMEROS RECUERDOS
«El Mundial del 94 nos marcó muchísimo a los colombianos, fue el primero que pude ver pero sobre todo entender la magnitud que tiene un Mundial. A todos nos acabó afectando la muerte de Escobar, todo eso marcó un antes y un después. Coincidía con una época de mucha violencia en nuestro país y aquello mostró el grado de locura que se estaba viviendo.
Por entonces yo estaba con mi familia viviendo en Venezuela, pero sí nos llegaban las noticias, la familia nos llamaba para contarnos. De alguna manera los colombianos casi que nos acostumbrábamos a vivir así. Después del 94 empezó a tranquilizarse la situación».
SUS PRIMEROS ÍDOLOS
«No admiro a nadie como tal porque todos los humanos nos equivocamos, así que admiramos hechos o actos, no la totalidad de una persona porque no es perfecto. Me fijaba en Ronaldo, pero también en Ronaldinho, Van Nistelrooy. Me pareció extraordinario el Mundial que hizo Villa en 2010″.
«Había una regla que decía que sólo un menor de 16 años podía jugar en el primer equipo, así que mi expectativa era ser el elegido. Fueron pocos minutos, pero lo disfruté. Pensaba sobre todo en ser capaz de disfrutarlo, más que en el propio partido y en que estaba jugando con tipos grandes y profesionales».
FUTBOLISTA PROFESIONAL
«Yo estaba convencido de que quería ser profesional, pero nunca tienes la certeza de que lo vas a lograr, vi a muchos con mucho talento más que yo que se quedaron en el camino. En esto se sobrepone el trabajo, la perseverancia por encima del talento. Tenía muy claro lo que quería, quizás otros no lo tenían tan claro y se desviaban del objetivo».
HOMBRE DE FE
«En la vida no te va a ir siempre bien, y es ahí cuando a veces he cuestionado mi fe. Me preguntaba una y otra vez por qué me tocaba pasar por eso. Pero aprendí que situaciones así se dan para corregir o mejorar algo en mi vida. Es una tarea personal descubrir cuál. Al final siempre obtengo la respuesta.
Desde el punto de vista espiritual, tengo una relación personal con Dios que solo él y yo sabemos, que me orienta en qué debo mejorar o fortalecer. Lo que a veces me ha parecido malo después ha salvado mi vida en otros aspectos. Lo que los de fuera han visto como algo negativo, sé que adentro mía me ha salvado de muchas cosas».
SU FORTALEZA
«Mi perseverancia, mi fe, creer que las cosas van a salir. Ese es mi punto fuerte. Dios es mi pilar en todo esto, la fe que tengo en Jesucristo es la que me ha ayudado a no tirar la toalla en muchas ocasiones. Cuando no veo la salida, él me recuerda que en el momento oportuno se dará».