José Mourinho se robó el show en la victoria de la Roma (2-1) sobre el Sassuolo. El luso, que llegó a 1.000 partidos como entrenador, celebró con euforia el tanto del triunfo. El técnico portugués Corrió 60 metros para unirse a la piña de jugadores.
«¡Les he mentido a todos! Le dije al equipo durante días que este juego número 1.000 no era importante para mí… ¡pero tenía un miedo increíble de perder! Por suerte ganamos y hoy corría como un niño porque me sentía con 12 años, no con 58», confesó Mourinho al final del emocionante encuentro.