La peor falta de esta semana se vio el pasado martes en la Primera B de Chile. Joaquín Pereyra, defensa del Santiago Wanderers, agredió a dos rivales en el empate (2-2) ante el Santiago Morning. El central uruguayo le dio un codazo en la cara al primero y una patada en la pierna al segundo, por lo que recibió la tarjeta roja más justa de la historia.