El Atlético Patronato se coronó campeón de la Copa Argentina. Los Rojinegros vencieron por la mínima diferencia (0-1) a Talleres de Córdoba en la gran final. El gol del título llegó tras una insólita carambola desde 25 metros de Tiago Banega, que dejó sin respuesta al portero albiazul.
El volante de Patronato fue al suelo a arañar una pelota que se le había ido larga con la extraña suerte de que el rebote tocó en un defensa de Talleres. La carambola entre Tiago Banega y Gastón Benavídez terminó con el balón en el fondo de la red. ‘El Patrón’, que jugará el próximo año en la Segunda División, logró su primer título y jugará la Copa Libertadores y la Supercopa Argentina.