Nuevo tropiezo del Liverpool en la Premier League. Los reds perdieron el pasado sábado (1-0) ante el colero del torneo. El Bournemouth dio el golpe de la jornada 27 gracias a un golazo de Philip Billing y al insólito penalti que falló Mohamed Salah, que pudo cambiar el rumbo del partido.
Los dirigidos por Jürgen Klopp fallaron ante el Bournemouth en las dos facetas del juego. Su defensa hizo aguas en el único tanto del encuentro y Salah tuvo en sus botas el empate, pero envió a las nubes una pena máxima en el minuto 69. Como consecuencia, el Liverpool es sexto con 42 puntos, seis menos que el Tottenham que por ahora tiene el último cupo de clasificación a la Champions League de la próxima temporada.