El 27 de abril del 2011 es una fecha muy especial para los hinchas del Barcelona. Aquel miércoles será siempre por como el día que Lionel Messi destrozó al Real Madrid en la Champions League. Los merengues recibieron a los culés en el partido de ida de las semifinales, sin imaginarse que sería uno de los partidos más recordados de la historia.
Aquella noche, los madridistas no sólo vieron cómo no podían vencer a su histórico rival sino que también sufrieron el desequilibrio del astro argentino, quien metió los dos goles con los que el Barcelona prácticamente se aseguró el pase a la final; teniendo en cuenta que el juego de vuelta, en el Camp Nou, terminó empatado (1-1).
El primer gol de aquella noche fue a los 31 minutos del segundo tiempo, cuando Lionel sorprendió a Sergio Ramos y le ganó de anticipo. Pero la obra de arte llegó a tres minutos del final, con una apilada monumental desde el círculo central hasta casi el área chica del Madrid, que terminó con un derechazo cruzado ante la salida de Iker Casillas.
Un detalle no menor: eran los primeros dos goles en contra que el Real Madrid sufría en esa Champions League en su estadio. El genio frotó la lámpara y eliminó a los merengues de la máxima competición europea. Así mismo, le permitió a los culés llegar a la final y posteriormente coronarse campeones tras vencer al Manchester United de Inglatera.
Aquel partido quedó grabado en la memoria de todos los que estuvieron presentes en el Santiago Bernabéu y será siempre recordado como el día que Leo Messi destrozó al Real Madrid en la Liga de Campeones.
