El 23 de abril del 2017 es una fecha muy especial para los hinchas del Barcelona. Aquel domingo será siempre por como el día que Lionel Messi humilló al Real Madrid en el Santiago Bernabéu. Los merengues recibieron a los culés por la jornada 33 de la Liga, sin imaginarse que sería uno de los partidos más recordados de la historia.
Todo comenzó bien para los blancos, que se pusieron en ventaja con un gol de Casemiro. Sin embargo, los azulgranas y le dieron la vuelta al marcador con los tantos de Messi e Ivan Rakitic. Los locales se quedaron con un hombre menos tras la expulsión de Sergio Ramos, pero aún así pudieron igualar el partido con una anotación de James Rodríguez.
Iban 85 minutos cuando anotó el colombiano, por lo que el empate parecía definitivo. Hasta que apareció Leo nuevamente. Al minuto 92, la estrella del Barcelona finalizó una gran jugada colectiva y sentenció el triunfo de los visitantes. El genio frotó la lámpara y enmudeció al Santiago Bernabéu, uno de los estadios más icónicos del mundo.
El argentino no sólo marcó el tanto de la victoria y amargó a Cristiano Ronaldo, sino que también se sacó la camiseta y se la mostró a todo el estadio. Su eufórica y recordada celebración tenía una clara explicación: ése había sido su gol 500 con el Barça. Una fecha inolvidable que será siempre recordada como el día que Lionel Messi humilló al Real Madrid en su propio estadio.