El mejor gol de la semana (y uno de los mejores de la temporada) se marcó este martes en Inglaterra. Jaden Philogene-Bidace anotó un increíble golazo de rabona con el Hull City. El joven extremo lideró la remontada ante el Rotherham United (1-2) con una genial definición que incluyó caño y vaselina.
El futbolista británico protagonizó una jugada de puro videojuego. Aunque la anotación acabó contando como gol en propia puerta de Cameron Humphreys, al desviar el balón y convertir lo que probablemente era un centro en un golazo brutal. El desvío del defensa fue tan mínimo y la acción del atacante tan genial, que no vale la pena discutirlo. Lo importante es que el remate de rabona, con caño, recorte y vaselina incluidos, acabó besando la red.