Luis Suárez es un claro ejemplo de que los buenos jugadores no necesitan tiempo de adaptación. En todos los equipos en los que ha jugado ha rendido desde el primer momento. Acaba de llegar a Gremio y ya ha marcado cuatro goles en dos partidos. Este sábado anotó un golazo en la victoria (1-2) sobre el Caxias.
El charrúa, que debutó con un triplete en el partido correspondiente a la Supercopa de Brasil, sumó su segundo partido consecutivo viendo puerta en el inicio del Campeonato Gaúcho. El uruguayo aprovechó una jugada colectiva en el minuto 76 para anotar el 1-2 gracias a un buen control dentro del área y un derechazo imparable desde el punto de penalti.