Los jugadores del Barcelona se han quitado un peso de encima. El tejido elegido para las camisetas de este año retenían demasiado sudor, tanto que los futbolistas debían soportar hasta unos 500 gramos extra de peso en los minutos finales de los partidos. Por este motivo Nike y el conjunto catalán acordaron cambiar la tela de la indumentaria. Al parecer un problema con el tinte azul y grana provocaba que el tejido retuviese los líquidos, por esto las nuevas vestimentas que se estrenarán ante el Racing, tienen una tela y tintes diferente, que le permitan a los jugadores desempañarse con más facilidad sobre el terreno de juego.
Ha sido una decisión conjunta adoptada a petición de la propia plantilla. El diseño será el mismo, pero la marca deportiva ha elegido un tejido que absorbe antes y mejor los líquidos. Desde la compañía achacaron el problema a los tintes, cuestión que afectó de manera puntual a las primeras equitaciones. No se ha tenido el mismo problema con la segunda (negra).