Daniel El polémico estratega luso se mostró irritado por el juego defensivo del West Ham, bastante similar al utilizado por su Inter ante el Barcelona semifinales de la Champions.
«No hagas a los demás cosas que no te gustaría que te hicieran a ti»… este popular dicho aplica bastante para el último capítulo protagonizado por el siempre polémico José Mourinho, quien esta vez recibió un poco de su propia medicina.
La reciente jornada de la Premier League no fue una más de las tantas que se han disputado. Ésta sirvió para darnos cuenta que al estratega luso le gusta la «ley» del embudo: hacer, pero que no que le hagan; al portugués le gusta ganar a como de lugar, pero no perder ante un rival que piensa y actúa de la misma manera.
Eso quedó demostrado durante el empate a cero goles (0-0) entre Chelsea y West Ham United, en el mítico Stamford Bridge. El cuadro londinense no encontró quien filtrase un pase decisivo a Samuel Eto’o. Su dominio no tuvo recompensa, porque empujó más que desarboló.
Todos sus disparos se fueron estrellando ante la defensa rival o detenidos por Adrián, el ex-guardameta del Betis que se doctoró en la casa del Chelsea y sacó de quicio al siempre «fastidioso» José Mourinho, quien no dejaría las cosas así.
Al final del partido el ex-entrenador del Real Madrid mostró su disgusto y su enfado sobre el juego defensivo del West Ham:
Sus palabras tuvieron bastante eco y fueron muy comentadas en las redes sociales. El motivo es uno sólo y tiene que ver con aquel partido de semifinales de Champions en el que el Inter de Milán de Mourinho eliminó de la competición al favorito Barcelona, utilizando un extremo planteamiento defensivo.
Los fanáticos no terminamos de entender porque el estratega luso dice todas esas cosas de un rival que utilizó la misma estrategia empleada por él para acabar con aquella hegemonía azulgrana. En ese momento dio resultado y este miércoles también fue muy útil para el West Ham ante su pionero (víctima de su propia medicina).