Daniel El habilidoso atacante inglés salvó al Manchester United de un nuevo empate y a su entrenador de abandonar prematuramente el banquillo.
La jornada futbolera de esta recta inicial de nuevo año ha estado marcada, como de costumbre, por las atajadas, golazos, jugadas y bloppers, entre otras cosas, que se vivieron en los pocos lugares del mundo donde desde ya se juega. En otras palabras, marcada por los hechos que han derivado de la actividad en los distintos torneos locales como la Premier League, que nunca se detiene.
Uno de los sucesos que se presentó durante las últimas horas y que ha dado mucho de que hablar en la prensa deportiva mundial es el protagonizado por Wayne Rooney durante la victoria del Manchester United (2-1) ante Swansea City, en partido valido por la jornada 20 de la Premier League. El histórico atacante inglés acabó con 13 fechas de sequía y se reencontró con el gol para salvar la papeleta de su equipo y de su entrenador.
Como ante el Chelsea, se zafó entre los centrales, bajó a recibir, a asociarse y a aguantar el esférico. Pero esta vez, tuvo premio: de tacón, en un plástico remate, batió a Fabianski logrando el gol del triunfo y convirtiéndose en el segundo máximo realizador de la historia de la Premier. 188 dianas que dejan atrás las 187 de Andy Cole. Sólo Alan Shearer (260) le supera. Llevaba desde el 17 de octubre esperando alcanzar esta marca que lo ratifica como uno de los mejores de la historia en su posición.
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